Poco más de dos décadas. Es el tiempo que le ha llevado a Shanghái pasar de ciudad cualquiera a ser uno de los centros financieros más pujantes a nivel mundial con 24 millones de habitantes. Su grantransformación comenzó a partir de 1990, cuando el Partido Comunista Chino empezó a destinar millones y millones a reinventar la ciudad. Y nada mejor para comprobarlo que superponer dos fotos: una de 1987 y otra de 2013. El resultado es casi increíble.
Donde antes solo había zonas agrícolas y semi-industriales, hoy se encuentra Pudong, el segundo corazón financiero de China junto a Hong Kong y uno de los más importantes a nivel mundial. Ahí, en Pudong, junto a laPearl Tower (finalizada en 1994) se encuentra ahora la Shanghai Tower. Cuando finalicen en breve su construcción será el segundo edificio más alto del mundo después del Burj Khalifa de Dubái.
Esta es la foto de Shanghái 1987:
Y esta la de 2013:
Como todo, este milagro económico tiene su cara B. Queda muy poco (por no decir casi nada) del antiguo Shanghái, de los mercados callejeros, las casas tradicionales, los diminutos comercios... Hoy, la mayor atracción en la zona antigua de la ciudad (la Old Town) es un enorme mercado turístico alrededor de los jardines de Yuyuan en el que, disfrazados de antigua arquitectura oriental, te encuentras Starbucks, McDonald´s y cadenas de comida rápida china. Los comerciantes de antes, los mercados de antes, la arquitectura de antes, ha quedado reducida a pequeños rincones rodeados de rascacielos y grúas que esperan como en silencio a devorar lo poco que queda del Shanghái de hace 20 años.
No hay duda: el antes conocido como "París de Oriente" es hoy una ciudad brutal, impresionante. Pero también un ejemplo de que el progreso (y el capitalismo) tiene un precio.
Fuente: Gizmodo ES